Somos Historia: Alison Sydor

Tres Copas del Mundo, tres Campeonatos del Mundo, una medalla de plata olímpica, entre otras hazañas da una buena muestra de la constancia y fortaleza de Alison Sydor. Esta canadiense se convirtió en una figura mítica dentro del ciclismo femenino.

Cuenta su padre cómo aprendió a montar en bici la pequeña Alison cuando tenía apenas cinco años: «Simplemente, el chico que vivía al lado tenía una bici nueva y no podía con ella. Ella la cogió, se montó y salió pedaleando... Sin más».

Estaba claro que el ciclismo era lo suyo. Años más tarde esa niña se acabó convirtiendo en una de las mujeres más laureadas de todos los tiempos en el mountain bike.

La avalan tres copas del mundo, con 17 victorias incluidas, una medalla de plata olímpica (Atlanta 1996) y tres campeonatos del mundo en los que además acumula cinco medallas de plata y tres de bronce. Durante trece años consecutivos, entre 1992 y 2004, nunca bajó del quinto puesto en unos campeonatos de mundo.

Después de tocar «varios palos», como el baloncesto, el voleibol, el hockey sobre hielo, el esquí alpino y el triatlón, Alison Sydor comenzó empezó a correr en ciclismo de carretera cuando estudiaba en la Universidad de Victoria, en Calgary. En un año recaló en el equipo nacional y tres años después, tras ganar cuatro campeonatos nacionales en ruta, se convirtió en la primera canadiense en ganar una medalla en unos campeonatos del mundo en ruta, bronce en Stuttgart 1991.

Ese mismo año había empezado a correr en mountain bike, venciendo, tras algunas carreras, su primera prueba de Copa del Mundo en Chateau D'Oex (Suiza).

En 1992 era la número 3 del ránking mundial en carretera, pero en los Juegos Olímpicos de Barcelona no pudo ser más que 12ª. Según reconoce ella misma con la perspectiva que da el tiempo, «estaba aprendiendo aún como atleta y no estaba todavía preparada para asumir la presión de ser una de las favoritas».

Ese año en cambio logró la medalla de plata en los campeonatos de mundo de mountain bike de Bromont. La suerte estaba echada, Alison Sydor se pasaba al sendero, fichando para 1993 ya como profesional por el por entonces mejor equipo del mundo, el Volvo Cannondale, con el que estaría corriendo hasta el año 2000.

En 1994 logró su primer título mundial, una victoria que marcaría su carrera, le dio la confianza que necesitaba para marcar una época en el ciclismo femenino de montaña.

Lo único que se le resistió a Alison Sydor fueron los Juegos Olímpicos.

Con dos títulos mundiales consecutivos ya en su haber, Alison Sydor era la favorita para vencer en los Juegos Olímpicos de Atlanta, el gran objetivo de aquel año, pero las cosas no le salieron aquel día como esperaba. Supo rápidamente que no se encontraba en su mejor día. Se escapó en cabeza para tener controlada la carrera pero con los 33 grados y la asfixiante humedad reinante, no era un día para ser temeraria y acabó siendo alcanzada y superada por Paola Pezzo.

Eso sí, ese año repitió campeonato del mundo y consiguió su primera Copa del Mundo, destronando definitivamente a Juliana Furtado, a la que acabó sucediendo como gran dominadora del cross country durante la segunda mitad de la década de los noventa.

Siguió compitiendo al más alto nivel hasta 2004. Miembro del Mountain Bike Hall of Fame desde 2007, se retiró definitivamente a finales de 2009, aunque continúa ligada al ciclismo dedicando parte de su tiempo al fomento del deporte femenino a través de clinics.

Actualmente vive a caballo entre Vancouver y Victoria (British Columbia), donde restauró con sus propias manos una antigua casa de madera de 1910. «No soy mala carpintera», dice de sí misma...