¿Te montarías en una bici plegable para hacer MTB?
Brompton acaba de presentar su nueva bici G Line, una bici que mantiene la característica de ser plegable, el sello de identidad de la casa inglesa, pero que apuesta por unas ruedas de mayor tamaño, de 20”, buscando una mayor polivalencia y poder usarla más allá de los límites del asfalto urbano. Evidentemente el cuadro es completamente nuevo, con una geometría adaptada a esta medida de ruedas.
Otro detalle que define a la nueva G Line es el hecho de que los neumáticos son unos Schwalbe específicos para este modelo, en configuración tubeless, aunque se pueden servir con unos neumáticos Continental con una configuración más urbana.
El principal requisito de una Brompton es que sea plegable y se quede en unas dimensiones manejables. La tecnología Fold de la marca inglesa hace que la G Line se quede en unas medidas de sólo 690 mm (alto) x 730 mm (largo) x 402 mm (ancho) en un tamaño pequeño, para lo que el diseño del cuadro y los pliegues han tenido que ser estudiados a fondo para poder albergar las ruedas de mayor tamaño. Plegar la bicicleta hasta la mitad permite a los propietarios dirigirla con el sillín o remolcarla con el manillar, de forma que la G Line permanece unida y se desliza como una maleta con ruedas.
Aunque el tamaño del cuadro es el mismo, la nueva Brompton G Line está disponible en tres opciones de tamaño (pequeño, mediano y grande) en función de la longitud de la potencia. El peso declarado es a partir de 13,9 kg de peso y cuenta con el juego de pedales QR de plataforma ancha de la marca. También cuenta con los nuevos puños ergonómicos Brompton que ofrecen un plus de amortiguación y soporte y el sillín Brompton Superlight con base de carbono.
Cambios en el buje Shimano Alfine
La Bromton G Line equipa un sistema de 8 velocidades que cubre todos los terrenos. Súper simple de usar y de muy bajo mantenimiento, operado con un solo gatillo en el manillar. Al ser un sistema basado en buje, los engranajes están escondidos dentro de la rueda trasera, protegidos del agua, el barro y los impactos.
Bromton G Line eléctrica
Además de la versión convencional, la G Line está disponible en versión eléctrica con un motor al buje trasero de 250 W y una batería de 345 Kw/h, lo que ofrece un rango de autonomía entre 30 y 60 km. En las instalaciones internas de I+D de Brompton, el nuevo motor se puso a prueba en una plataforma de durabilidad que funciona las 24 horas del día, los 7 días de la semana, con más de 20 motores recorriendo un kilometraje combinado de más de 1.000.000 km.
Gama y precios
La Bromton G Line con el sistema de 8 velocidades tiene un peso de 13,9 kg (en talla S), mientras que la versión con portabultos y guardabarros pesa desde 14,8 kg (también talla S). Por su parte, la G Line eléctrica con sistema de 4 velocidades, portabultos y guardabarros tiene un peso declarado desde 16,1 kg sin batería y de 19,5 kg con batería. Todos los modelos disponibles en Forest Green, Adventure Orange y Traildust White.
Su PVP comienza en 2.395 € hasta los 3.495 € de la G Line eléctrica en función de los accesorios como luces, portaequipajes o guardabarros.
Nuestra opinión
La calidad de los productos Brompton es de sobra conocida y una bicicleta como la G Line puede aportar una buena solución a un público inminentemente urbano y que por necesidades de transporte o almacenamiento necesita bicicletas pegables, pero que no descarta abrir un poco más sus recorridos habituales incluyendo caminos de tierra compactada o de grava. Esto incluye también el poder moverse con agilidad en los parques forestales que cada vez más rodean las ciudades europeas y cuyos caminos suelen estar en buen estado.
No obstante, tampoco hay que llamarse a engaño, las ruedas no dejan de ser sólo de 20", no hay suspensión de ningún tipo y este tipo de cuadros plegables no son tan rígidos, estructuralmente hablando, como un cuadro completo convencional. Por lo que no podemos pensar en estas bicicletas para hacer trialeras o senderos o pensar en ellas como una solución para la movilidad urbana que, en este caso, nos abre el abanico de acción y de terrenos a explorar.
También hay que pensar que las bicicletas plegables suelen estar diseñadas para responder las necesidades de aquellos ciclistas que, además de la propia bicicleta, necesitan viajar con ella en el transporte público (o en uno privado de pequeñas dimensiones) y por tanto la capacidad de plegarse y la rapidez a la que podemos hacerlo son sus principales argumentos.
Brompton no han sido pioneros con este concepto, anteriormente ya habíamos conocido otros proyectos, pero el impulso que se le puede dar a esta modalidad con la llegada de una marca con tanto peso específico sí que puede ser interesante.
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