Specialized Camber FSR WMN Comp
28/11/2016
Specialized presenta una bici nueva, aunque el nombre Camber no es novedad dentro de su gama de bicis trail, pues existe desde hace ya algunas temporadas. Pero de cara a este 2017 la marca californiana ha decido lanzar una nueva versión femenina, la Specialized Camber FSR WMN con ruedas de 27,5” destinada a sustituir al modelo Rumor de 29 pulgadas.
Y como cada vez que pruebo una bici con geometría específica de mujer, suelo tener la impresión de que es un dolor de cabeza para las marcas crear bicis destinadas al público femenino. ¿Seremos tan complicadas? Pero aunque así pueda ser, vuelvo a apreciar un serio y creciente interés de las marcas por nuestro segmento. Está claro que es uno de lo actuales caballos de batalla en la industria.
A este respecto, hay un cierto debate sobre la necesidad de recurrir a geometrías específicas en el cuadro, o si esto es innecesario, al considerar que las diferencias básicas e importantes se cubren simplemente con la elección de componentes específicos, fundamentalmente en los puntos de contacto de la chica con la bici.
Como algunas tendencias apuntan ahora, para la nueva Camber los ingenieros de Specialized han preferido crear un cuadro basado en la misma geometría que la Specialized Camber de hombre, algo que muchos empiezan a denominar geometría «unisex». ¿Por qué esta decisión?
La inmensa base de datos de información biométrica a la que tienen acceso en la marca de California, referente a miles de mujeres ciclistas que se han hecho estudios de biomecánica en los distintos distribuidores autorizados de la marca, e incluso en las oficinas centrales, ha sido la base de esta decisión. Con esta información Specialized no sólo busca las diferencias morfológicas entre hombres y mujeres, sino cómo afectan éstas a nuestra manera de montar en bici, en función del tipo de terreno y del estilo de conducción.
En esta ocasión, para este tipo de bici se ha concluido que las diferencias entre hombres y mujeres no son significativas como para que una geometría específica de mujer pueda mejorar las sensaciones y el rendimiento en marcha. Incluso conociendo la diferente relación peso/potencia entre un género y otro o el diferente peso medio entre hombres y mujeres para una misma talla.
Las siglas WMN de Specialized son una garantía de que esta Camber está pensada en cada detalle por y para nosotras
Pero eso no significa que la nueva Specialized Camber FSR WMN no sea una bici pensada por y para las mujeres. Las configuraciones específicas para chica pueden llegar a sorprenderte. Empezando por la configuración de las suspensiones, con un amortiguador con un «tuninng» específico más liviano y suave.
A partir de ahí, la longitud de la potencia y la anchura, altura y retraso del manillar; los puños que te mantienen en contacto con el puesto de mandos; el sillín de 155 mm de anchura; y las bielas con longitud en función de la talla. Todo está pensado no sólo en nosotras, sino en el uso que le vamos a dar a esta bici.
Y con estos mimbres, el cesto de la nueva Specialized Camber FSR WMN. Una bici para el segmento probablemente más popular, que casi todo el mundo bautiza como «trail». 130 mm de recorrido en ambas suspensiones en busca de la máxima polivalencia. ¿Responde al reto de hacerte las cosas más fáciles?
Specialized Camber FSR WMN: Haciendo las cosa fáciles
La versión Comp Carbon de la nueva Specialized Camber FSR WMN que ahora nos ocupa, atrae fuertemente la atención con ese elegante azul oscuro mate, rematado con un acabado algo brillante y detalles rojos y plata. Una presentación lejos de los colores estereotipados fucsia o rosa que a mí personalmente me parece espectacular y todo un acierto.
Con la agenda repleta de viajes, no tenía todo el tiempo que me hubiera gustado para dedicarle a la nueva Specialized Camber, así que me propuse exprimirla al máximo desde el minuto uno. Algo que además me animó a ello es que me sentí muy cómoda desde el primer momento. Apenas hago mis reglajes habituales de altura de sillín, posición de manetas y demás, y salgo a rodar acoplándome fácilmente desde el principio.
Y como este otoño que ya se nos ha echado encima va alternando algunas lluvias con estupendos días de sol, a la que veo los rayos asomar me lanzo a rodar por lo más alto de nuestra Sierra de Guadarrama. En un terreno así de montañoso, si quieres ganar altura ya sabes lo que te toca: subir y subir. Y en este primer examen, la nueva Specialized Camber FSR WMN me ha sorprendido por sus excelentes condiciones de escaladora.
He encontrado más tracción de la que me esperaba, con un sistema de suspensión sensible a los pequeños impactos que mis ruedas se iban encontrando, y he podido subir zonas muy empinadas en las que a menudo hay que echar pie a tierra. Seguro que el amplio balón y el dibujo de sus cubiertas también ayudan.
Esa sensibilidad de su triángulo trasero no molesta para nada cuando aprietas sobre los pedales, pues en tramos de pedaleo en los que lanzaba la bici la suspensión se mantenía firme respondiendo a mi acometidas. La nueva Specialized Camber FSR WMN es rápida, aunque obviamente no estamos ante una bici con la que disputar una carrera de XC, pero se muestra muy rígida cuando esprinto o cambio bruscamente de dirección. Las tres posiciones del amortiguador ayudan a sacar el máximo provecho de tus piernas y ajustar el comportamiento al terreno.
La elección de neumáticos aporta un plus de seguridad para encontrarte cómoda cuando el terreno se complica y hacerte las cosas un poco más sencillas en tu pilotaje, pero como es lógico sacrifican un poco de rendimiento si quieres correr.
Pero esta bici está hecha sobre todo para divertirse, y si te gusta hacer largas kilometradas y apuntarte a marchas y rutas no competitivas, es una elección ideal.
Y mientras hacía todos esos kilómetros buscando los senderos más divertidos y yendo como una loca de aquí para allá para ver cómo me respondía la nueva Specialized Camber FSR WMN, he podido aprovechar para ver en detalle cómo funcionan todos esos pequeños grandes detalles de la bici.
Desde el utilísimo compartimento SWAT Door, que me permite transportar los recambios que tanta pereza me da llevar en la mochila y lleva el portabidón incorporado, al sistema AutoSag con el que regular el hundimiento de tu suspensión de manera automática para ir siempre con la referencia adecuada (aunque puedes variarla a tu gusto o según el terreno).
Además, la simplicidad en el uso de las transmisiones 1x11 parece ir a juego con la filosofía de la nueva Specialized Camber FSR WMN de facilitarte el pilotaje, para que sólo te preocupes de divertirte.
Porque cuando llega la hora de bajar, la sonrisa sale rápido en mi rostro. La bici es ágil y fácil de manejar y sus ruedas de 27.5” me permiten cambiar rápido de trayectoria. La tracción de las cubiertas se traduce en seguridad y me empuja a ir más rápido y buscar mis límites.
Límites que obviamente los tiene, porque la Specialized Camber FSR WMN no es una enduro. Si bajas muy, muy, fuerte y tu peso digamos que… no es muy liviano… igual los frenos se te quedan un poco cortos. Pero es sólo algo mejorable, porque la mayoría de nosotras tenemos más que de sobra en una bici con la que poder adentrarnos por cualquier terreno, siempre en busca de diversión.
Resumiendo, la nueva Specialized Camber FSR WMN es una bici trail de manual, polivalente, con un excelente compromiso para disfrutar tanto de las subidas, como sobre todo de las bajadas
La nueva Specialized Camber FSR WMN es una bici divertida. Es como esa compañera de ruta que nos hace reír siempre y con la que estás deseando quedar a montar. Porque está pensada para nosotras, para que adentrarnos en terrenos complicados y en largas jornadas de bici no sea un obstáculo que nos eche atrás.
Un conjunto equilibrado, que me ha sorprendido por su facilidad escaladora y por su seguridad en las bajadas. Estoy convencida de que responde a la necesidad de muchas chicas bikers de sentirse más seguras, de que la bici sea una aliada y no un problema para disfrutar más de las rutas. En ese sentido, la nueva Specialized Camber FSR WMN es todo un acierto. Una bici aventurera para no poner límites a tus ganas de comerte el mundo. ¡Chapeau!
La gama Camber FSR WMN de Specialized es aún pequeña, como corresponde a una recién formada familia. A nuestra modelo Comp Carbon probada aquí le acompaña solo una versión más, fabricada con el cuadro en aluminio M5. De momento no están todas las tallas disponibles en España, la Specialized Camber de carbono se puede adquirir en tallas S y M y la Specialized Camber de aluminio en tallas S, M y L.
Specialized Camber FSR WMN Comp Carbon 650b | 3.799 €
Specialized Camber FSR WMN 650b | 1.899 €
La bici al detalle...
El corazón de la nueva Specialized Camber FSR WMN es su cuadro, diseñado con geometría trail y compuesto con un triángulo delantero fabricado en carbono Fact 9m y un basculante trasero del ya clásico aluminio M5 de la marca, para hacer funcionar el popular y sensible sistema FSR de Specialized.
Este cuadro cuenta con todo lujo de detalles, desde el guiado interno de cables que refuerza la suavidad de sus líneas al ya famoso sistema SWAT integrado en el tubo diagonal, que te permite guardar material como herramientas y repuestos, amén de llevar el bidón en el porta que va integrado. También incorpora el estándar boost 148 para una mayor anchura del eje pasante trasero, que se traduce en más rigidez.
El acabado del cuadro en color azul mate, con un toque brillante y los detalles en rojo, es un ejemplo de una bici con una apariencia femenina pero sin caer en los tópicos de colores y flores. La apariencia de la Specialized Camber FSR WMN se corresponde a su comportamiento, equilibrado, seguro, rígido y manejable.
Las ruedas de nuestra Specialized Camber FSR WMN Comp Carbon son un conjunto de bujes y llantas de la casa, enlazados con radios DT Swiss Industry. Los bujes Specialized preparados para disco son de medidas boost, con 110 mm de ancho el delantero para eje pasante de 15 mm y 148 mm de ancho el trasero para el ya clásico eje pasante de 12 mm.
Para las llantas se ha escogido una pareja de aros Roval Traverse 650b, con una amplia garganta interior de 29 mm, combinando 24 agujeros para la rueda delantera y 28 agujeros en la trasera. Rematando el conjunto, unas pareja de cubiertas de la propia marca Specialized, listas para tubelizar. La delantera es el modelo Purgatory, y la trasera una Ground Control, ambas con un generoso balón de 2,3”.
Habiendo apretado bastante la nueva Specialized Camber FSR WMN, tanto en subidas como en bajadas, me han gustado por su rigidez y por su anchura de garganta, que ayuda a que el neumático ofrezca más balón. Esto se traduce en tracción y seguridad y, por tanto, en diversión.
En manos de Sram queda la transmisión de 11 velocidades y 1 solo plato, combinando un cambio de la gama GX de caja larga que se accionan desde un pulsador NX. Funcionan con la contundente facilidad clásica de los cambios y mandos Sram y la fiabilidad habitual que nos ha permitido rodar sin desajustes.
El casete PG-1130 y la cadena PC-1110 no son los más ligeros en la colección de Sram, pero cumplen con nota dentro del conjunto. Al ser elementos de desgaste, ya tendrás tiempo con su primer cambio de pasar a versiones más ligeras con una pequeña inversión.
Aunque puede haber quien piense que una transmisión de 2 platos podría ser un poco más polivalente, las que somos fans del 1x11 encontramos el conjunto perfecto para asaltar los senderos con la Specialized Camber FSR WMN. Ayudan a esto las bielas Race Face Aeffect con longitud específica para nosotras, en este caso de 170 mm.
Para el combo de potencia y manillar, un sobrio conjunto de la propia Specialized fabricado en aluminio. El manillar de 720 mm de anchura otorga suficiente control y está pensado con nuestra menor anchura de hombros en mente. Fabricado en aluminio 7050, tiene 10 mm de altura y unos grados de elevación y retraso.
Y la potencia Trail, también de aluminio forjado y con un largo de 60 mm, es un buen equilibrio para una bici con la que se pueden hacer muchos kilómetros sin renunciar a la diversión, para la que necesitamos un control que no nos falta aquí.
El remate del manillar de la nueva Specialized Camber FSR WMN son los no menos importantes puños, modelo Sip Grip de Specialized, con una agradable textura que en la casa denominan tipo «gofre» y que aporta comodidad para las rutas largas y más rotas.
Para detener esta locura de bici y cuidar de ti, Specialized confía la frenada en el modelo M506 de Shimano. Una pareja de frenos hidráulicos de disco discreta que no va sobrada de potencia pero que cumple a la perfección por su fiabilidad y habitual buen funcionamiento.
Vienen montados con discos de 180 mm para la rueda delantera y 160 mm para la trasera, una medida acertada y suficiente. Si le das un uso agresivo a esta Specialized Camber, adentrándote en terrenos endureros, igual debes plantearte unos frenos aún más consistentes.
En el tren delantero la Specialized Camber FSR WMN viene equipado con una horquilla RockShox Revelation RL en versión Solo Air, con ajuste de rebote y con mando remoto de bloqueo al manillar. Cuenta también con el imprescindible eje pasante MaxleLite. Sus 130 mm de recorrido funcionan con gran sensibilidad en terrenos bacheados y rotos y te hacen sentir cómoda y segura en las bajadas.
Para la suspensión trasera se monta un amortiguador Fox Float Performance con un ajuste RX Tune Trail específico para este uso y para nosotras, más suave. Su sistema DPS con tres posiciones de uso permite diferenciar su funcionamiento cuando bajamos (abierto), cuando rodamos normalmente (medio) o cuando subimos y esprintamos (firme), accionando la tradicional palanca azul.
Además, el amortiguador cuenta con el sistema AutoSag de Specialized, que hace de la regulación de la suspensión algo muy sencillo. Lo regulas la primera vez, y después ya es coser y cantar, siempre con tu suspensión trasera ajustada a ti.
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