Mantenimiento básico de los frenos de disco
Los frenos de disco son una parte fundamental de nuestra MTB, los llevamos al límite y les confiamos nuestra propia integridad física. Como cualquier otra parte de nuestra bicicleta de montaña, necesita un mantenimiento básico para poder seguir confiando en su rendimiento.
Si tienes tu bici cerca, al leer esto, posiblemente te hayas acercado para comprobar el estado de las pastillas, pero el mantenimiento básico va un poco más alla. Manetas, latiguillos, pinzas... todo forma parte del sistema de frenado y no te hace falta un doctorado para realizar unas tareas sencillas con las que detectar algún problema e incluso solucionarlo.
Manetas
Revisar que no haya ninguna fuga por las tapas y el émbolo de empuje. Recuerda que siempre hay que utilizar los aceites o líquidos que precise tu marca de frenos para un correcto funcionamiento.
Latiguillos
Comprobar que no están dañados por el roce con el cuadro o doblados tanto en la inserción de la maneta como de las pinzas. Unos latiguillos en mal estado comportan una pérdida importante de frenada así como el funcionamiento defectuoso de la maneta.
Pinzas de freno
Es el elemento que precisa más cuidado y limpieza. Revisar que no haya fugas de aceite en las juntas tóricas que envuelven los pistones, la boquilla de sangrado o la unión con el latiguillo. Una fuga en este punto, además de provocar la pérdida de potencia, puede contaminar las pastillas.
Pastillas
Cambiar cuando tengan menos de 0,5 mm de grosor, cuando estén contaminadas o cuando lleguemos el indicador de desgaste, así como al cambiar los discos. Y recordar siempre emplear el tipo de pastilla adecuada para cada disco y uso.
Discos
Revisar que no estén doblados o descoloridos, así como el grosor de los mismos, que no debe ser inferior a 1,5 mm. Importante también es hacerles el rodaje adecuado cuando son nuevos.
Aceite/líquido de frenos
Si le da uno uso normal a tu MTB, la recomendación es cambiarlo una vez al año. Pero si compites o le das un uso más intenso, por ejemplo, en enduro o DH, mejor reemplazarlo dos veces al año.
Del uso y las condiciones en las que utilices y disfrutes de tu bicicleta de montaña dependerá el desgaste de sus componentes. Como ves, una revisión y mantemiento sencillo y habitual de tu MTB lo puedes realizar tranquilamente en casa.
Para trabajos más especializados, cambios de aceite o líquido, etc, te recomendamos que vayas a talleres especializados y puntos oficiales de las marcas donde recibirás la mejor atención con toda la garantía.
¿Quieres estar al tanto de todas las novedades de MTBpro?
Suscribete a nuestro newsletter para no perderte el mejor contenido relevante, novedades, opinión, podcast, etc.