Orbea Rise H10
25/02/2022
Tengo la suerte de poder probar una de las bicicletas más esperadas del año, además tenía muchas ganas de hacerlo, después de hablar con mi compañero Iñaki, que pudo disfrutar de la versión de carbono durante el año pasado y terminó haciendo una gran aventura con ella, como es la Trans-Nomad.
A primera vista tardé unos segundos en reconocer que era la nueva versión de aluminio. Por si no lo sabes, Orbea utiliza una técnica de pulido en las soldaduras de los cuadros hechos de este material, dando un acabado que hace realmente difícil diferenciarlo del carbono en un primer vistazo. Pero tranquilo, con unos simples golpecitos con el dedo en el cuadro, esos que damos todos cuando tenemos delante una bici nueva, podrás corroborar que se trata de la nueva Orbea Rise H.
Lo siguiente que hice fue cogerla y levantarla con los brazos. La estética de la bici es igual que la versión de carbono y no terminaba de estar convencido de que fuese la de aluminio. Aquí sí noté una ligera diferencia de peso, aunque no mucha, la verdad, poco más de 1 kg. Pero esta diferencia de peso no es solo por el material del que está hecho el cuadro. En la versión de aluminio han conseguido colocar una nueva batería rediseñada que proporciona 540 Wh, es decir, aumenta en 180 Wh respecto la de carbono.
Light e-bike
Antes de meterme más a fondo en especificaciones, déjame que te explique dónde se sitúa esta bici. A estas alturas, imagino que ya habrás escuchado “Light E-bike” en alguna ocasión, pero quizás aún no tengas muy claro cuáles son las diferencias respecto a una e-bike, digamos convencional o “full power”. Como podrás imaginar por el nombre, son bicis más ligeras, debido a que la capacidad de la batería es menor aunque, como era de esperar, ya comienzan a llegar baterías de mayor capacidad pero de reducido tamaño y peso. También montan motores limitados en cuanto a potencia. No solo hacen que la ayuda sea menos evidente, sino que también reduce el consumo de batería. Todo este combo de particularidades hace que este tipo de bici estén a medio camino entre una trail pulmonar y una trail e-bike full power.
Ahora mismo este tipo de e-bikes están abriéndose camino. Aún son un nicho pequeño dentro del sector de la bici, pero cada vez gana más adeptos entre la comunidad ciclista. ¡Y es que es normal! Tienes la diversión, ligereza y necesidad del esfuerzo físico casi como en una bici “pulmonar” pero con el apoyo al pedaleo por parte del motor en las zonas más exigentes.
Todo esto ya nos lo contó Xabi Narbaiza y lo plasmó Iñaki en el test de la Orbea Rise de carbono: “Tenía claro que entre los 13 kg de una trail actual como nuestra Occam y los 23 kg de una e-Bike al uso había hueco para una nueva bici, algo diferente que pudiera ofrecer lo mejor de ambos mundos”.
Igual geometría
Voy a entrar en aspectos más técnicos. La geometría de esta nueva Rise H, es exactamente igual que la de carbono, es decir, una bici de trail/all-mountain puro. Siguiendo la tendencia del mercado, se ha diseñado un tubo de sillín para poder instalar tijas telescópicas largas, en concreto de 419 mm en la talla M que he probado. El ángulo de este tubo 77º/76,5º proporciona un pedaleo cómodo y eficaz. En cuanto a la dirección, tenemos una pipa de 105 mm en talla M con un ángulo de lanzamiento 66º/66,5º. Estas medidas no distan mucho de las bicis de enduro, Xabi no dio puntada sin hilo. Siendo una bici que exige dar pedales para subir, cuando llega la bajada te devuelve ese esfuerzo en forma de diversión y se comporta casi tan bien como una Rallon.
Conseguir mantenerse a mitad de camino entre las bicis pulmonares y las e-bikes full power no es nada fácil. Normalmente tendemos a “embrutecer” nuestras bicis y los ingenieros tienen que tener mente fría y claro el objetivo. En este caso, crear una e-bike lo más parecida a una bicicleta tradicional.
Es aquí donde entra en juego el motor Shimano EP8 RS, de 2,6 kg. Las siglas que lo hacen especial son las de Rider Synergy. Este concepto es propio de Orbea en colaboración con Shimano. A simple vista no se puede apreciar ninguna diferencia respecto al EP8. Es lógico, todo el trabajo de customización está en el interior. El software modificado hace que la potencia sea de 60 Nm y esta se transmita a las bielas de manera sincronizada con la cadencia y la fuerza que apliques a los pedales, es decir, cuanto más aprietes pedaleando mayor será la potencia que desarrolle el motor para ayudarte. Otro efecto que se consigue con esta modificación es que te obliga a ir con una cadencia alta, igual que irías con tu bicicleta convencional.
Un beneficio que obtienes con esta bajada de potencia es que se consigue una mayor autonomía, ya que se reduce el consumo bastante y además se mantiene la salud del motor y batería. Al igual que se dice de los coches de gran cilindrada y no muchos caballos, el motor va holgado y aumenta la fiabilidad. Lo mismo pasa con este motor Shimano EP8 RS de Orbea. Un detalle diferente a su hermana de carbono es el botón de encendido. Lo han ubicado justo encima del motor y del pedalier, con un fácil acceso para accionarlo y protegido de posibles salpicaduras.
Después de conocer cómo funciona el motor, el bajo consumo de batería y la gran autonomía que tiene la Orbea Rise H…, ¿sigues pensando que quizá te quedes sin batería en tus grandes rutas? No te preocupes, ¡Orbea también ha pensado en ti! Ponen a la venta un Range Extender de 252Wh por 499 €, que se acopla en el hueco del bidón y te dará un total de 792 Wh. Ten en cuenta que el Range Extender de la Rise M (carbono) no es compatible con este nuevo modelo Rise H (aluminio), ya que el conector es diferente.
Si continúo con la parte eléctrica, tan solo me queda hablarte del display, si es que se puede llamar así. En esta versión utilizan un Shimano EW-EN100 con 2 luces LED que cambian de color dependiendo el modo de asistencia que estemos utilizando. Quiero resaltar que en el modo Boost la luz naranja no se diferencia muy bien, algo que ya comentó Iñaki en la prueba de la Rise M. Siguiendo con el minimalismo en esta parte, la botonera para cambiar los modos de asistencia está muy bien resuelta, queda muy integrada en el manillar y apenas se ve. Como cualquier motor Shimano, se puede customizar el nivel de asistencia de cada modo, con la App E-Tube de la propia marca.
En cuanto al montaje, tan solo hemos modificado la horquilla haciendo un upgrade a una Fox 36 Float Factory Grip2 Kashima de 150 mm de recorrido para darle un toque más agresivo en las bajadas. Esta modificación supone un incremento de 149 € sobre el PVP y puedes seleccionarlo en la propia web de Orbea. El amortiguador es un Fox Float DPS Factory de 140 mm de recorrido. Ambas suspensiones cumplen con creces su función, trabajando muy suave sobre cualquier terreno.
La transmisión que lleva esta bici es Shimano XT de 1x12 velocidades, un piñón con una relación de 10-51 dientes y unas bielas E*thirteen Direct Mount con plato de 32 dientes. Una combinación ideal para una uso trail habitual, permitiendo subir cómodo y con buena cadencia. Los frenos también son Shimano XT de 4 pistones con discos Galfer de 180 mm. Dan una buena mordida y tacto seco.
En el apartado ruedas verás que monta unas Race Face Turbine R30 TLR de 29” preparadas para Tubeless. Son fiabilidad y rigidez asegurada para un uso trail. Es en las cubiertas donde tengo que poner una nota negativa. A mi parecer, es un error no poner una cubierta con carcasa reforzada. Aunque se pierda algo de ligereza, va a ser insignificante si con ello nos aseguramos no tener que parar a reparar un corte en la cubierta. Es verdad que siendo una e-bike ligera no tendríamos que pensar en esto, pero la bici baja tan bien que te pide guerra y acabas tirándote sin piedad en las bajadas.
Por último te contaré sobre el copkit. Como ya viene siendo habitual en esta gama de Orbea, montan componentes Race Face. La potencia es la Aeffect R de 35 mm a la que le acoplan el manillar Next R 35 mm con un rise de 20 mm y una longitud de 780 mm. Postura muy cómoda y sensación de seguridad y control brutal. He de confesar que es una de mis combinaciones favoritas.
Sensaciones
La Orbea Rise H me ha sorprendido desde el primer minuto. Realmente está muy conseguido el conjunto motor/cuadro ligero para dar ese feeling de bici pulmonar y casi no apreciar cuándo entra en funcionamiento el motor y cuándo corta la ayuda. Cuando voy pedaleando fuerte sí noto que me está empujando, pero no llega a ser tan obvio como para relajarme y dejar de exigirme. Eso me ha gustado mucho y creo que a todo aquel que le tire para atrás una e-bike full power porque sienta que le ayuda demasiado también le va a gustar este concepto de e-bike light.
Otro punto a favor ha sido la ligereza del conjunto. Me ha proporcionado facilidad en la conducción y algo menos de esfuerzo físico para entrar en las zonas más reviradas, tanto subiendo como bajando. Me ha resultado una bicicleta muy polivalente, gracias al upgrade de la horquilla. Podría decir que ha sido la excusa perfecta para soltar frenos bajando.
La bici al detalle...
Motor Shimano EP8 RS, customizado para este modelo ofreciendo 60 Nm de par con 3 modos de asistencia que podrás ajustar a tu gusto a través de la App E-Tube de Shimano. Así conseguirás la mayor eficiencia y menor consumo en base a tu modo de conducción y tipo de rutas.
Display minimalista, con tan solo 3 luces LED podrás ver si la asistencia a la pedalada está apagada o en cualquiera de sus 3 modos. También indica cuando activamos el modo Wall Assist.
El conector de carga viene con una tapa con cierre de clip, sellando frente al agua y suciedad la parte eléctrica. Es en este mismo conector donde se coloca el Range Extender de 252 Wh que nos ofrece Orbea por 499 €.
El mando para cambiar los modos de asistencia es bastante pequeño y queda muy bien integrado en el manillar de la bici. En este mismo lugar tenemos el pulsador de la tija telescópica.
Transmisión Shimano XT 1x12, uno de los grupos más fiables del mercado, no solo por su gran durabilidad sino por su buen funcionamiento. Es muy suave y preciso, incluso en condiciones extremas.
Tija telescópica OC MC20 de 31,6 mm con 150 mm de recorrido en talla M y L. Se reduce a 125 mm en talla S y aumenta a 170 mm en talla XL.
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