Las ventajas de combinar las pastillas Pro (las verdes) y los discos Shark de Galfer
En disciplinas como el enduro o en el mundo del eMTB, el sistema de frenado se convierte, aún más, en uno de los pilares fundamentales del rendimiento y la seguridad. Las bicicletas son más capaces, más rápidas y, en el caso de las eléctricas, significativamente más pesadas. Esto somete a los frenos a un estrés térmico y mecánico mayor. Ya no basta con tener potencia bruta de frenado; se necesita consistencia, modularidad y una resistencia al “fading” (la pérdida de potencia por sobrecalentamiento) que sea infalible.
En este escenario, Galfer se ha posicionado como un referente, no solo por fabricar un componente, sino por ofrecer un ecosistema de frenado completo. La marca española, con décadas de experiencia en la alta competición de motociclismo, aplica todo ese conocimiento al ciclismo. Y es que la sinergia entre el disco y la pastilla es la clave del éxito.

Y aprovechando que Iñaki se fue a la Trans-Nomad con la combinación de las pastillas G1554T PRO y los discos Shark de 223 mm, además de que nos faltaba por probar el disco de 223 mm (la Orbea Wild que ha usado viene de serie con unos discos de 203 mm) analizamos el rendimiento de esta combinación en el mejor terreno posible y en un entorno para el que han sido diseñados, una competición en el Pirineo Aragonés.
No todas las pastillas son iguales: la gama Galfer
Antes de centrarnos en la combinación elegida, es crucial entender que Galfer ofrece un compuesto para cada ciclista. La elección de la pastilla correcta depende de tu modalidad, las condiciones climáticas e incluso tu peso:
- Compuesto Standard (G1053 - Negras): Son las "todo terreno". Ofrecen un equilibrio perfecto entre potencia, durabilidad y ausencia de ruidos. Son ideales para un uso XC, Trail e incluso para usuarios de nivel aficionado en Enduro.
- Compuesto Advanced (G1851 - Rojas): Diseñadas para condiciones adversas. Si tus rutas habituales incluyen barro, agua y suciedad extrema, estas pastillas, con fibras basálticas, mantienen un rendimiento constante y efectivo.
- Compuesto E-bikes (G1652 - Moradas): Desarrolladas específicamente para las bicicletas eléctricas. Soportan temperaturas más altas, ofrecen una gran durabilidad y potencia, y cuentan con la homologación ECE R90. Son la elección lógica para quien busca un reemplazo fiable y duradero para su e-MTB.

Galfer G1554T PRO: las pastillas "verdes" de competición
Ahora vamos a analizar las protagonistas de esta combinación: las pastillas verdes, el compuesto G1554T PRO. Unas pastillas que, de hecho, ya tuvimos la ocasión de probar a fondo en MTBpro. En aquel test, combinadas con los discos Wave, nos demostraron todo su potencial para la competición y para los amantes del alto rendimiento.
En su momento ya Iñaki Gavín las calificó como "sencillamente extraordinarias", destacando que eran "totalmente silenciosas" y aportaban una "frenada constante y potente desde el primero hasta el último metro".
La característica más destacada de este compuesto, y que pudimos corroborar en dicha prueba, es que no necesitan rodaje. Gracias a un tratamiento térmico especial durante su fabricación (donde se polimerizan los componentes, incluidas las fibras aramidas), las pastillas ofrecen el 100% de su rendimiento desde la primera frenada. Esto es una ventaja táctica inmensa en competición o para el usuario que necesita cambiar pastillas justo antes de una salida importante.
Pero su verdadera magia aparece cuando el terreno se inclina. Están diseñadas para descensos extremos donde los frenos alcanzan temperaturas críticas. Mientras otros compuestos empiezan a desfallecer, las G1554T mantienen una frenada firme y prolongada sin perder potencia.
¿La contrapartida? Como todo material "de carreras", su durabilidad es menor, un coste asumible a cambio de las prestaciones puras que ofrecen.

El compañero perfecto: disco Galfer Shark de 223 mm
Una pastilla tan capaz necesita un disco que pueda seguirle el ritmo. Si en nuestro test anterior el disco Wave ya demostró una gran refrigeración y cero problemas de alabeos, el Galfer Shark llega para optimizar aún más ese rendimiento térmico.
El diseño del Shark, con sus características aletas de refrigeración internas y el patrón de perforación, está optimizado para disipar el calor de la forma más eficiente posible. Al mantener una temperatura de funcionamiento más baja (Galfer habla de hasta un 30% de reducción), el disco se mantiene estable y reduce la temperatura que se transfiere a la pastilla y al líquido de frenos.
Al optar por un diámetro de 223 mm y algo muy importante, los 2 mm de grosor frente a los 1,8 mm habituales, multiplicamos esta ventaja. Un disco más grande ofrece más palanca (mayor potencia de frenado con menos esfuerzo) y, sobre todo, tiene más masa y superficie para absorber y disipar una cantidad de calor mucho mayor. Además de aportar resistencia al sobrecalientamiento, el grosor añadido también evita que el disco se doble con el calor o el uso.

Por qué nos gusta esta combinación
Ahora, unamos las piezas. ¿Qué ocurre cuando montamos las pastillas G1554T PRO en una pinza que muerde un disco Shark de 223 mm? Obtenemos un sistema de frenado de rendimiento superlativo, ideal para los escenarios más exigentes.
1. Alta modularidad: la combinación del gran diámetro del disco (223 mm) con el compuesto agresivo de la pastilla (G1554T) proporciona una potencia de frenado brutal. Es, de hecho, una potencia que ya notamos en nuestra prueba anterior, donde Iñaki Gavín mencionó que tuvo que "resetear la manera de frenar debido a su gran poder de frenada".
Sin embargo, y aquí está la clave, no es una potencia "on/off". El tacto firme de las pastillas verdes permite una modularidad excepcional. Es lo que en aquel test se describió como "una buena conexión que se crea entre tu dedo y lo que ocurre... todo sucede de manera muy directa", permitiendo regular la frenada fácilmente con un solo dedo.
2. Resistencia al fading: este es el punto clave. En un descenso largo, el disco Shark de 223 mm actúa como un radiador gigante, disipando activamente el calor. Las pastillas G1554T, por su parte, están diseñadas para funcionar a altas temperaturas. El resultado es que, mientras otros frenos desfallecen, esta combinación se mantiene constante, firme y potente desde la cima hasta el valle.
3. Rendimiento inmediato: para el rider de enduro o el e-biker agresivo que busca la máxima prestación, el hecho de no necesitar rodaje es una comodidad que se transforma en rendimiento. Se acabaron las primeras bajadas "con cuidado". Desde el primer metro, el freno responde.

¿Para quién es esta combinación?
Seamos claros: esta no es una combinación para pasear. Montar las pastillas G1554T PRO con discos Shark de 223 mm es el setup definitivo para el corredor de Enduro o Descenso que busca el máximo rendimiento.
Es también la solución perfecta para el usuario de e-bike muy agresivo. Es la diferencia entre bajar "gestionando" el sobrecalentamiento y bajar atacando con total confianza, sabiendo que, sin importar la pendiente o tu velocidad, la potencia de frenado estará ahí cuando la necesites.

Nuestras conclusiones después de Trans-Nomad
Como ya tenemos experiencia con los productos de Galfer sabíamos que las pastillas verdes con los discos Shark de 223 mm es una combinación orientada al DH, enduro y e-bikes de enduro, para recorridos con mucho desnivel. El disco está sobredimensionado y ofrece una frenada muy estable, con una mordida potente que no baja su rendimiento, ideal para este tipo de recorridos tan exigentes en las que los discos se calientan y en algunos casos llegan a perder algo de rendimiento. Esto no sucede con los Shark gracias a su diámetro y al grosor de 2 mm.
Detalles como el tratamiento rugoso de la banda de frenado se nota también en la efectividad de la frenada. Lo que se agradece, ya que reduce la fatiga, en las frenadas más largas.
Al final, poder modular la frenada con un solo dedo, pese a enfrentarte a unas condiciones tan duras para el sistema de frenado (y para el biker) es una ventaja añadida, ya que ganas en seguridad y reduces sensiblemente la fatiga de la mano, del brazo... y del propio sistema de frenado.
Además, apostar por una combinación como las pastillas Pro y los discos Shark de Galfer es una forma más económica de mejorar sensiblemente tu frenada sin tener que cambiar todo el sistema de frenado. Y más aún si eres de los que compiten y necesitas un rendimiento inmediato sin tener que pasar por el proceso de rodaje o también si necesitas, por peso (del biker, de la bici) o por practicar una modalidad radical y agresiva necesitas, la potencia extra que ofrece un disco tan sobredimensionado como el Shark de 223 mm.

¿Quieres estar al tanto de todas las novedades de MTBpro?
Suscribete a nuestro newsletter para no perderte el mejor contenido relevante, novedades, opinión, podcast, etc.
Redacción MTBpro
Luis M. del Cerro, Archivo






