Guía rápida: sistemas de suspensión para MTB

VPP, Horst Link, Split Pivot, Monopivote… Aunque cada marca utiliza un nombre en particular, todos los sistemas de suspensión parten de algunos conceptos generales. Te damos las claves para que puedas entenderlos e identificarlos.
Guía rápida: sistemas de suspensión para MTB
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autor mtbpro J. Daniel Hernández
autor de las fotos Archivo

fecha25/01/2024


La llegada de las dobles suspensión fue la última revolución antes del debate generado con los tamaños de rueda. Con bicicletas que parecían, cada vez más, motos, era lógico que se adaptasen algunos avances y tecnologías de éstas. Aunque antes había que lograr bajar el peso.

Una vez conseguido, la evolución de los sistemas de suspensión ha sido imparable. Centrándonos en la trasera, tenemos diferencias de hasta 10 cm de recorrido en función del uso que le vayamos a dar a la bicicleta. Incluso, tal y como vimos en el artículo que diferenciaba el recorrido de la carrera de un amortiguador, el mismo amortiguador puede ofrecernos longitudes bastante diferentes en función del sistema que se emplee.


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Como vimos en dicho artículo, cada sistema de suspensión obtiene una curva de progresividad diferente por el uso de bieletas de distinto tamaño, ubicación y número de puntos de giro, etc… por lo que se necesita un tamaño específico de amortiguador para obtener el mismo recorrido o, dicho de otra forma, para lograr 130 mm de recorrido en la rueda trasera, en función del sistema que utilice la bicicleta, necesitará un amortiguador con una carrera u otra.

Por eso hemos preparado esta Guía Rápida de los sistemas de suspensión trasera. Para conocer las nociones generales de cada uno de ellos, sus puntos fuertes y los débiles y alguna necesidad específica que puedan tener. En realidad, aunque parece haber miles de ellos, derivan de los mismos 3 o 4 sistemas base. De hecho, en muchos casos las diferencias entre uno y otro son tan sutiles que cuesta mucho diferenciarlos sin tener los conocimientos específicos de ubicación y patentes de los puntos de giro, amortiguador, etc.

Monopivote y monopivote articulado

El monopivote es uno de los sistemas más sencillos. El amortiguador se ancla por un extremo al cuadro (de forma directa o mediante alguna bieleta) y por el otro al basculante trasero. Este basculante (que puede ser único, en modo viga, o formado por las vainas y tirantes), se une directamente al cuadro en un punto de giro principal.  Es un sistema muy sencillo en el que no encontramos ningún punto de giro en la rueda trasera y tiene como resultado un recorrido muy lineal.

Sus ventajas, además de un menor mantenimiento, es que es sencillo gestionar la sensibilidad del recorrido, ya que depende enteramente del amortiguador y su tarado (cuanto más se comprime el amortiguador más blanda se vuelve la suspensión, luego podemos jugar con la cantidad de aire del amortiguador para compensar este efecto). Sus desventajas es que, precisamente al carecer de puntos de giro, este sistema está muy expuesto a la contaminación que crean las inercias de la cadena y especialmente de la frenada.

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Para paliar estas desventajas en la medida de lo posible, pero manteniendo la sencillez del sistema, aparecieron los sistemas de monopivote articulado, que incluía una bieleta para independizar el amortiguador del triángulo trasero dotándole de un recorrido diferente y mayor progresividad. Dependiendo del tamaño y ubicación de dicha bieleta se consigue una mayor progresividad del recorrido y una mejor independencia de la pedalada y frenada, aunque sigue siendo un sistema en el que interfieren bastante. Habitualmente estos sistemas requieren de amortiguadores con bloqueos bastante efectivos para poder rendir mejor en los tramos de subida.

Posteriormente aparecieron los sistemas en los que se incluía un nuevo punto de giro en el triángulo trasero (concéntrico a la rueda, en la vaina o el tirante) dando lugar a sistemas diferentes (Split Pivot, Horst Link…).


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Derivados del monopivote articulado: Horst Link

Se trata de un sistema que mezcla el uso de bieletas cortas y una amortiguación más desmultiplicada con la ubicación del punto de giro del triángulo trasero en la vaina, es decir, antes de la rueda. Al incluir estos puntos, el sistema se vuelve más progresivo e independiza mucho más las tensiones generadas por la frenada del recorrido de la rueda trasera.

Sus desventajas vienen derivadas también de la inclusión de muchos más puntos de giro, ya que se crean más fricciones, más holguras y demandan un mayor mantenimiento y que siguen teniendo bastante interferencia del pedaleo, por lo que requieren de un diseño de bieletas que reduzcan el “pedal-bob” del amortiguador o de sistemas de bloqueo bastante efectivos.

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El FSR de Specialized ha sido uno de los sistemas de monopivote articulado o Horst Link más reconocibles; también el 4-Bar de Kona o los sistemas OST y OST+ de Lapierre.


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Derivados del Monopivote articulado: Split Pivot y ABP

El Split Pivot es un sistema que deriva de un Monopivote articulado y del Horst Link, ya que el triángulo trasero está unido a los dos extremos del amortiguador, con una bieleta en la parte superior y directamente a las vainas en el inferior e incluye un punto de giro concéntrico a la rueda. Dave Weagle, con su sistema DW-Link fue el máximo exponente o desarrollador de este sistema que BH adoptó al inicio de sus Lynx para luego desarrollar un sistema propio (derivado del DW-Link) como es el Split Pivot.

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El ABP o Active Braking Point de Trek es un sistema similar al Split Pivot ya que cuenta con un punto de giro en el eje de la rueda trasera, también prescinde de la bieleta inferior, estando el amortiguador anclado directamente al triángulo trasero por ambos extremos.

Ambos sistemas independizan prácticamente del todo la interacción de la pedalada y la frenada con el amortiguador, logrando un excelente comportamiento aun sin bloqueo. Además, la capacidad de absorción que se logra es mayor, siendo un sistema bastante progresivo con una trayectoria de la rueda en forma de arco en lugar de ser vertical. Por el contrario, su principal desventaja es la aparición de más puntos de giro con las fricciones, mantenimiento y peso que ello conlleva.


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VPP (Virtual Pivot Point) o Pivote Virtual

En este sistema las bieletas empiezan a cobrar mucho más protagonismo, ya que son las encargadas de unir el triángulo trasero tanto con el principal como con el amortiguador por ambos extremos. La ubicación y longitud de estas bieletas son las que marcan, entre otras cosas, la carrera necesaria del amortiguador, la progresividad que tendrá el sistema, el movimiento final que hará la rueda trasera (nunca “sube” en una perfecta vertical, sino que describe una curva).

En él desaparece el punto de giro de la rueda trasera, obteniendo un basculante unificado (vainas y tirantes forman un bloque). El objetivo de este sistema es compensar la fuerza que comprime el amortiguador al pedalear con una de sentido contrario que la contrarresta al “tirar” del amortiguador.

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Si se logra un perfecto tarado del amortiguador, que por lo general es bastante blando con las ventajas que esto conlleva, este sistema apenas necesita bloqueo para ser efectivo. Santa Cruz e Intense son marcas que han sido pioneras en el desarrollo del sistema VPP. El Sistema Maestro de Giant, es otro ejemplo de Pivote Virtual. El nuevo Virtual Contact System de Commencal es otro ejemplo de interpretación del VPP.

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Amortiguador flotante

Derivado también del VPP encontramos los sistemas de amortiguador flotante, llamado así porque el amortiguador no se ancla directamente al cuadro, sino que lo hace a los dos extremos del basculante mediante bieletas en ambos extremos que, a su vez, están ancladas al triángulo principal. Con ello se consigue que las fuerzas que comprimen el amortiguador (también que lo liberan) vengan desde los dos extremos.

El objetivo es aumentar el efecto conseguido en los VPP de que a la hora de pedalear un extremo busque comprimir el amortiguador mientras que el otro “tire” de él compensándose ambas. Sus desventajas son las mismas que en el sistema VPP, además de que se incrementa el coste del sistema y se pierde algo de sensibilidad al principio del recorrido del amortiguador.

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El sistema Zero de Mondraker es uno de los máximos exponentes de un VPP con amortiguador flotante.


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Sistema Softail

No podemos cerrar una guía de suspensiones sin mencionar el último sistema en instaurarse. En este caso no existe un punto de giro principal entre el pedalier y las vainas, sino que se recurre a la propia flexión del carbono de las vainas para dotar a la rueda trasera de cierto recorrido. Tampoco existe un amortiguador como tal, sino que se recurre a un elastómero o elemento absorbente entre los tirantes y el tubo del sillín o el horizontal para lograr la suspensión.

Realmente tampoco es una idea revolucionaria, ya que algunas marcas como Cannondale experimentaron con este concepto. Eso sí, los primeros modelos incluían un amortiguador completo en lugar de un elastómero y en muchas ocasiones se montaban en cuadros de acero y aluminio.

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Algunas bicis de carretera y rígidas de XCO, como la Trek Procaliber, lo utilizan.

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