Domina las subidas: 3 consejos para subir más rápido con tu MTB

3 consejos clave para subir mejor

A continuación te dejamos tres consejos que te ayudarán a escalar de forma más eficiente y a disfrutar de cada cumbre que conquistes.

1. Dosifica tu fuerza y juega con la cadencia: Atacar las subidas con una marcha muy dura puede parecer rápido, pero es una trampa. Forzar los músculos al principio provoca un desgaste prematuro y un "pájara" casi asegurada a mitad de camino. La clave está en la dosificación.

Cambia a un desarrollo más suave que te permita mantener una cadencia más alta y constante. Esto no solo te ayudará a conservar energía, sino que también te permitirá rodar con mayor agilidad sobre obstáculos. En terrenos complicados o resbaladizos (como el barro o la gravilla suelta), una cadencia más rápida es tu mejor aliada para mantener el control y no perder tracción.

2. Adelanta tu peso para ganar tracción: Uno de los mayores desafíos al subir es mantener la rueda delantera pegada al suelo. Si el sendero es empinado y tu peso está muy atrás, la rueda delantera se levantará, perdiendo la dirección y obligándote a bajarte.

Para evitarlo, adelanta ligeramente tu cuerpo y tu peso sobre el manillar, inclinándote hacia adelante sin encorvarte. Este sutil movimiento aumenta la presión sobre la rueda delantera y te ayuda a mantener la dirección. Es un equilibrio delicado: si te inclinas demasiado, podrías perder tracción en la rueda trasera; si no lo haces lo suficiente, la rueda delantera se levantará. Practica para encontrar el punto óptimo según la inclinación y el tipo de terreno.

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Truco: Un buen truco si tenemos una tija telescópica, que además se aplica en el terreno técnico y con las e-bikes (por el aumento de par que recibe la rueda trasera), es bajar la tija unos pocos centímetros para bajar y poder adelantar nuestro peso sin llegar a levantarnos del sillín y que la rueda trasera pueda perder tracción y agarre.

3. Elige la línea correcta y anticipa el terreno: Un sendero de montaña está lleno de sorpresas. Una roca inesperada o una raíz afilada pueden detener tu avance. La clave para superarlos es la anticipación.

Mira siempre unos metros por delante, no solo la rueda delantera. Escanea el terreno en busca de la "línea correcta", es decir, el camino con menos obstáculos, la mejor tracción o las zonas menos técnicas. A menudo, el mejor camino no es el más corto. Puede que tengas que zigzaguear para evitar un tramo muy rocoso o buscar la zona más compacta en un área de arena o tierra suelta. Aprender a leer el terreno te permitirá mantener un ritmo más constante y evitar interrupciones, haciendo que tus subidas sean mucho más eficientes y fluidas.

Conclusión

Subir con tu MTB no tiene por qué ser una batalla. Al dominar tres principios básicos, puedes transformar tus escaladas y hacerlas más eficientes y agradables. Recuerda dosificar tu fuerza y usar una cadencia alta para conservar energía. Aprende a adelantar tu peso para mantener la tracción y el control de la dirección. Por último, elige la línea correcta y anticipa los obstáculos para mantener un flujo constante. Pon en práctica estos consejos en tu próxima ruta y notarás una gran diferencia en cómo te enfrentas a las subidas.