Probamos las gafas Out Of Bot 2 Irid X-10: ¡se oscurecen y aclaran en menos de un segundo!

Las Out Of Bot 2 son la máxima expresión de tecnología e innovación en unas gafas fotocromáticas. Se trata de unas gafas cuya lente no es de policarbonato con filtro fotocromático como habitualmente, sino que nos encontramos una lente de cristal líquido (la misma tecnología que las pantallas de televisión, por ejemplo) que depende de la electrónica para la activación del cambio de tintado en la propia lente.

Aunque podría repetir todos los detalles de cómo funciona esta tecnología, la tecnología Irid de Out Of, en este artículo tenéis todos los detalles y un pequeño repaso a la historia de esta joven marca italiana. En el artículo también te contamos cómo este sistema, que cuenta con un sensor de luz, no necesita baterías para activar el diferente tintado del cristal, sino que cuenta con una pequeña placa solar que lo surte de la energía necesaria.

Y todo ello, además, sin que dispare el peso o la incomodidad cuando nos las ponemos. En nuestra báscula las Bot 2 han marcado 34 g (sólo 5 g más que unas gafas consideradas bastante ligeras) y la sensación que he tenido cuando me las he puesto es la misma que con cualquier otra gafa de alta calidad, una vez ajustadas han pasado a ser parte de mi cara. De hecho, la sensación de no llevar nada se acrecienta por el funcionamiento de la tecnología Irid y la impresionante velocidad del cambio de tintado, tanto a la hora de oscurecer como de aclarar la lente.

Según su ficha técnica, las Bot 2 cambian de categoría 1 (cielos nublados y completamente cubiertos) a categoría 3 (completamente despejados) en menos de un segundo. De hecho el modelo con lente Irid X-10 que he probado alcanza un oscurecimiento de hasta categoría 4 (el máximo, para superficies que también reflejan el sol como el mar, glaciares o el desierto).

Y si bien es cierto que la velocidad es real, particularmente me parecen un poco oscuras para ser un categoría 1. El cristal X-10 tiene un ligero tintado gris marrón que puede ser el responsable de esta sensación que he tenido, aunque es verdad que es más en estático que luego en marcha, cuando no he tenido la sensación de no ver lo suficiente ni siquiera en días muy nublados, a última hora, y en zonas muy cerradas (como sucede con unas gafas de sol convencionales e incluso con otras fotocromáticas de menor calidad). Simplemente es que me hubiese gustado que, de inicio, fuesen un punto más claras.

Y es que a mí me gustan mucho las gafas fotocromáticas porque me permiten mantener la misma visibilidad independientemente de si estoy en una zona abierta o en una zona más cerrada y oscura o si se nubla e incluso pone a llover. La principal ventaja que he visto a las Out Of Bot 2 es que, gracias a la impresionante velocidad del cambio de la lente la sensación es súper natural, el ojo no tiene que esperar a que las lentes se adapten (que siempre tardan unos segundos), sino que el cambio es inmediato, por lo que el ojo permanece mucho más relajado.

Esto es algo especialmente importante cuando hablamos de la velocidad de “clareo” ya que, además, puede ser el momento más peligroso. Pasamos de una zona con mucha luz a una zona oscura y podemos perder momentáneamente visibilidad del terreno, su contorno y lo que nos rodea. En este caso esa sensación desaparece.

De hecho, las he probado con cascos de carretera, que al no tener visera dejan más expuesto el sensor de luz, y cascos de MTB de corte trail/all mountain con viseras generosas y no he tenido problemas de ningún tipo ni de falta de sensibilidad del sensor. De hecho, la lógica dicta que si el sensor está más en la sombra por la visera, nuestros ojos tampoco recibirán el sol directo. Y como se oscurecen de inmediato si levantamos la cabeza y recibimos sol directo, no hay problema alguno en usar cascos de este tipo.

Un detalle interesante es que las Out Of Bot 2 están disponibles en versión Classic (con patillas ligeramente combadas para caras de tamaño normal) y versión Adapta, con patillas rectas con acabado de silicona para adaptarse a caras más pequeñas (como es mi caso). En este caso hemos probado las Adapta y el resultado ha sido excepcional en cuanto a agarre -incluso en condiciones de lluvia- y ajuste.

En cuanto a la disponibilidad de modelos, las Bot 2 están disponibles con la misma montura (en versión classic o adapta) y la lente X-10 que puedes ver en las fotos, por 379 € o en lentes Irid Blue, Irid Green o Irid Red (que sólo alcanzan cat. 3) por 359 €. Además, son compatibles con la instalación de clip-in oftalmológico para lentes correctivas y vienen con una funda de gamuza para protegerlas y limpiarlas y una interesante funda rígida para una mayor protección cuando las guardamos o transportamos.