Mondraker Dune Carbon XR
Tras la aparición de la esperada Foxy Carbon mucho se empezó a especular sobre la inminente llegada del carbono a la gama Dune. A pesar de estar 10 a 1 en las apuestas fue el modelo Summun el que, contra todo pronóstico, se «vistió» de carbono para dar forma a un espectacular cuadro que nos dejó a todos con la boca abierta.
El siguiente paso tampoco era muy difícil de adivinar, no sabíamos cuándo pero lo que sí teníamos claro es que, más temprano que tarde, el carbono llegaría a la Dune.
Echando el resto
Después de un rato largo delante de la Dune XR, de lo que no me cabe la menor duda es que en Mondraker han echado el resto a la hora de dar continuidad a su modelo de enduro por excelencia. Tras seis actualizaciones y ocho temporadas en activo es evidente que en Mondraker no han querido hacer una bici de enduro más, sino que han querido hacer «la bici» de enduro con mayúsculas.
A veces no ponemos en valor el enorme trabajo y el esfuerzo, en todos los sentidos, de una compañía tan pequeña como Mondraker en comparación con los grandes fabricantes asiáticos y americanos para ofrecernos un producto al mismo nivel tecnológico y de funcionamiento.
Personalidad Mondraker
Y es que durante los dos años que ha durado el desarrollo de la Dune todo alrededor de ella ha sido diseñado en torno al rendimiento y a las necesidades que el enduro actual requiere. Para conseguir esa rigidez estructural tan importante en una bici como esta se ha recurrido a la tecnología Stealth Carbon. Ya sé que la bici te parece muy bonita pero las caras planas y las aristas de los tubos del cuadro de esta bici no son por casualidad, todo tiene una explicación.
Aparte del gran sloping, de las líneas tan definidas de su cuadro y de los acabados tan espectaculares de esta Mondraker, no hace falta ser muy observador para darse cuenta que la nueva XR es una bici con una distancia entre ejes y un top tube más alargado de lo habitual. Y es que, desde que el Forward Geometry pasó a ser el sello identificativo de la marca alicantina, estas medidas ya no nos sorprenden pero siguen marcando la estética de la marca.
Basta con recorrer apenas unos kilómetros para sentir que vas sobre una auténtica bici de carreras. Suspensiones tope de gama, ruedas, frenos, manillar y potencia de 35 mm, mucho carbono...
Como ya me ocurrió al dar las primeras pedaladas sobre la Factor y sobre la Foxy, al principio necesitarás un mínimo de «aclimatación» antes de poder extraer todo el potencial y posibilidades que tiene el Forward Geometry.
La Dune fue la primera Mondraker que utilizó el sistema Zero Suspension System, y a lo largo de los años este sistema ha ido perfeccionándose hasta lograr una efectividad al mismo nivel que otros sistemas mucho más conocidos.
Primeras sensaciones
La sierra está llena de nieve y hielo, tendré que ir a montar a alguna zona más baja donde poder pedalear sin peligro y que además me permita sacarle todo el partido a esta bici. Dicho y hecho, allá voy...
Basta con recorrer apenas unos kilómetros para sentir que vas sobre una auténtica bici de carreras. Suspensiones tope de gama, ruedas, frenos, manillar y potencia de 35 mm, mucho carbono... Todo solomillo del bueno... La verdad es que pocas pegas se le pueden poner al selecto y cuidadoso montaje de esta bici.
Voy ganando altura por un sendero estrecho pero sin apenas complicaciones, pedaleo con soltura, la postura me ayuda y me sorprende la facilidad con la que esta Dune mantiene el ritmo ascendente recordándome mucho a la Foxy en cuanto a eficacia y pedaleo cuesta arriba. La postura es cómoda y natural, las primeras sensaciones no pueden ser mejores.
Termino de ganar altura y entro en una zona mixta y rápida llena de curvas peraltadas, aumento la velocidad y me agarro fuerte al manillar, la potencia de 35 mm junto con los 78 cm de anchura del manillar le dan a la Dune un toque de firmeza y aplomo a la hora de trazar casi al nivel de una bici de DH.
Los primeros giros también me sirven para comprobar que voy demasiado retrasado como para sacar todo el partido a la geometría Forward, después de varias bajadas aprendí a cargar un poco más de peso en la rueda delantera y conducir un puntito más adelantado con respecto a una bici con geometría «tradicional», nada preocupante que no vayas a pillar el primer día que sales a montar con la Dune.
Vuelvo a recuperar velocidad y me lanzo cuesta abajo a tumba abierta sin importarme mucho el estado del terreno. Cuanto más rápido voy mejor y más sujeta va esta bici. La Mondraker es una auténtica «bici race» diseñada para correr mucho, pisa de manera neutra y estable, consiguiendo aislarte del suelo de una manera casi irreal. La Carbon XR transmite sensaciones de seguridad y control como muy pocas bicis son capaces de hacerlo. Es realmente impresionante la facilidad de la Dune para ir a fuego manteniendo márgenes de seguridad relativamente altos.
Esta bici es como un pánzer alemán y tiene la facilidad de hacerte sentir todopoderoso cuando vas encima de ella sea cual sea el tipo de terreno por el que vas
Sobre terreno excesivamente revirado y ratonero sus 1.218 mm entre ejes se dejan notar y negociando curvas no te encontrarás tan cómodo como en otras situaciones. No es que estemos hablando de una bici torpe o descaradamente lenta, simplemente es que su comportamiento en zonas ultrarrápidas es tan efectivo que en comparación con otras situaciones es difícil de brillar a esa misma altura.
A volar
Sin apenas tiempo para pensar me acerco a una zona en la que abundan cortados y saltos, parece que no me va a quedar más remedio que prepararme para el vuelo... Esta bici es como un pánzer alemán y tiene la facilidad de hacerte sentir todopoderoso cuando vas encima de ella sea cual sea el tipo de terreno por el que vas.
Aprieto las manos y me tiro sin pensármelo dos veces, el vuelo es limpio y preciso, todo sucede según lo planeado. La bici en el aire es igual de noble que sobre el suelo, cosa que se agradece cuando entramos un poco descolocados o cruzados en un salto y tenemos que rectificar en el aire antes de aterrizar. Impresionante el equilibrio tanto de la horquilla como del nuevo Fox Float X2.
Sin duda el gran valor de la nueva Dune es haber conseguido aunar en una sola bici las mejores cualidades de la Foxy en cuanto a soltura, agilidad y eficacia en el pedaleo y a la vez tener el aplomo y el control a gran velocidad en bajadas de la Summum.
Enduro de diario
Si tienes claro que te gusta el enduro, las bicis de 170/160 mm de recorrido, si tienes claro que a la hora de subir vas a sufrir más que con otro tipo de bici más polivalente pero te da lo mismo porque te gusta bajar con sensaciones más cercanas al DH que al trail, si tienes cierto nivel físico y técnico..., entonces es que eres un endurero agresivo convencido. Si además eres de los que corren un par de carreras al año y eres asiduo a los bike parks de temporada no tienes nada más que pensar. Esta Dune XR te ofrece todo esto y mucho más para hacer de cada salida una auténtica carrera llena de diversión.
Mientras no montes sobre senderos excesivamente cerrados tendrás en tus manos una bici realmente eficaz y letal y tus compañeros de grupeta o tus rivales en los enduro te odiarán
La Mondraker Dune aprueba con nota a la hora de subir, pedalea de manera muy fluida y es ágil y manejable sobre terreno mixto. Mientras no montes sobre senderos excesivamente cerrados y revirados tendrás en tus manos una bici realmente eficaz y letal y tus compañeros de grupeta o tus rivales en los enduro te odiarán.
La nueva Dune es una bici con una personalidad y un comportamiento únicos, tremendamente rápida y muy segura con la que poder volar sin miedo. Además viene con un montaje sólido, a prueba de bombas y con todo lo necesario para hacerte pasar jornadas inolvidables en cada bajada. Si eres un «ready to race» ya tienes tu bici perfecta.
La bici al detalle...
Full Carbon, terminaciones impecables, diseño espectacular y una estética que quita el hipo, así es el cuadro de la nueva XR (2.450 g sin amortiguador, algo más de medio kilo más ligero que el anterior). Cableado interior, protecciones en vaina y tubo diagonal a la altura del pedalier, posibilidad de variar el lanzamiento de la horquilla en +1º/-1º grado y de alargar en un centímetro la longitud de las vainas (de 43 cm a 44 cm), nueva bieleta superior en carbono, protector ISCG05 y guardabarros de carbono, nuevo sistema de link inferior con ejes pasantes y tornillos con arandelas cónicas de mayor sección para mejorar y suavizar su funcionamiento, aumentar la rigidez y reducir el mantenimiento... Estas son solo algunas de las mejoras que nos trae la nueva Mondraker Dune XR.
El sistema de suspensión trasera Zero junto con el impresionante rendimiento del nuevo amortiguador Fox Float X2 Factory Kashima convierten la parte trasera de la Dune en el reino de la estabilidad y de la seguridad. Te dará lo mismo dónde y cómo aterrices o la velocidad a la que llegues a zonas descompuestas y delicadas. Los niveles de absorción que aporta el nuevo Fox son espectaculares, un amortiguador que me ha dejado impresionado por su comportamiento y posibilidades de regulación. Imposible no encontrar tu tarado ideal. Regulable en rebote (alta y baja), compresión (alta y baja) y presión de aire. Eso sí, necesitarás dos llaves allen para variar los reglajes. En subidas se muestra bastante más estable de lo que podríamos esperar teniendo en cuenta que hablamos de un amortiguador de largo recorrido. Estéticamente es bestial.
El Sram X01 es el grupo perfecto para esta auténtica enduro purasangre. El X01 es suave, rápido, eficaz y muy preciso. A lo largo de toda una mañana endureando seguro que haces muchos tipos de cambios, unos más favorables y otros más «forzados», no te preocupes, el X01 nunca te dejará tirado. Realmente cuesta encontrarle una pega a un grupo como este. Monta de serie un plato de 32T.
Las tres Dune Carbon disponibles en 2016 montan la misma tija telescópica, y eso quiere decir algo. Las principales características de la RockShox Reverb siguen siendo su precisión, buen funcionamiento en subida/bajada y la suavidad y facilidad para accionarla, sin duda una jugada segura. El sillín es un SDG Circuit con raíles de titanio, con el que no tuve ningún problema de adaptación, al principio me pareció un poco duro pero con el paso de los kilómetros me convenció.
No me canso de decirlo, los Sram Guide RSC «se lo frenan todo» y encima bien. Son potentes, suaves y muy cómodos de manejar. Sea cual sea el tipo de bajada a la que te enfrentes con los Guide RSC puedes estar tranquilo, aportan tal sensación de seguridad y control que harán que siempre quieras darlo todo hasta el final, cosa que el cronómetro y tu Strava seguro que te lo agradecerán al final de cada tramo. El único pero lo encuentro en el diámetro del disco delantero, en mi opinión esta bici debería montar un disco de 200 mm en lugar de los 180 mm que lleva de serie.
Las Mavic Crossmax XL Pro son unos «ruedones» las mires por donde las mires. Ruedan muy finas, son muy rígidas pero sin llegar a ser monolíticas, súper fiables y además estéticamente le dan un toque muy pro a la Dune XR. Sus 23 mm de ancho interno se quedan un poco «cortos» en relación a los anchos que se vienen montando últimamente en bicis de enduro. El sonido del buje Mavic hipnotiza. Durante todo el tiempo que he rodado con la Dune no he tenido ni un solo problema de destalonamiento pero en alguna ocasión, rodando con presiones bajas, cercanas al kilo, sí que he notado cómo por el flanco de la llanta ha salido algo de líquido. La cubierta delantera es la Charge de Mavic, un prodigio de agarre y seguridad, de lo mejor que puedes montar hoy en día en la parte delantera de tu bici. La cubierta trasera también es Mavic, pero el modelo Quest, una rueda un punto menos agresiva que la Charge pero que rueda mejor sin sacrificar tracción y estabilidad en frenadas. Una combinación perfecta.
La Fox Float 36 Fit Factory Kashima con regulación en alta/baja, rebote y precarga de aire no deja de sorprenderme, cuanto más la pruebo más me convence. Sus 36 mm le dan un punto extra en términos de firmeza y apoyo que la sitúan un paso por delante de la competencia en este aspecto. Una vez en marcha todo resulta fácil con esta horquilla, el tacto inicial es exquisito y muy sensible y el resto de sus 170 mm de recorrido son un verdadero seguro de vida cuando toca bajar rápido y arriesgar. Personalmente me he sentido más cómodo y seguro con algo menos de presión de aire que lo que Fox recomienda en su tablas de peso/aire. Todas las regulaciones son exteriores y se pueden modificar con la mano incluso con los guantes puestos, algo que se agradece por comodidad y rapidez.
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