Probamos la Ducati MIG-S, una ebike trail bajadora y divertida

Los recorridos de suspensiones de 150 mm delante y 140 mm detrás nos hablan de una Trail de manual. Pero la configuración “mullet” empieza a mandarnos señales que la geometría del cuadro de aluminio 6061 confirma. Por ejemplo, sus 66º de ángulo de dirección se combinan con reach de 432 que te coloca en una posición corta y elevada. Una posición que invita al juego, al salto, al peralte. Para que esta posición no se convierta en un problema en las bajadas, los diseñadores de la bici han optado por alargarla de vainas hasta los 450 mm y retrasar un poco la posición con un ángulo de tubo de sillín de 74,7º.

En subidas reviradas le puede faltar un punto de reactividad, pero en las trialeras de bajada esta bici da mucho más de lo que anuncian sus suspensiones. Sobre todo, en diversión.

Un montaje que va a lo seguro

El SRAM NX no es lo más sexy del catálogo de la marca americana, pero si de lo más fiable y más que razonable cuando toca sustituir elementos como el cassette o la cadena. SRAM también se ocupa de los frenos, unos SRAM Guide T de cuatro pistones que frenan más que suficiente y modulan lo justo y necesario en una bici como esta.

Del mismo grupo son las suspensiones, una RockShox 35C delante y un SuperDeluxe R detrás. No es mala combinación y son parte de un sistema de suspensión con bastante miga. Lo es porque como buen Horst Link no ahorra en bieletas y puntos de giro. Pero, a diferencia de otras bicis, esta complejidad tiene un sentido práctico. Y es que esta Ducati tiene un nivel de desmutiplicación y progresividad en el las suspensión trasera que hace que el amortiguador funcione con suavidad incluso en las peores circunstancias. Se nota que hay mucho “mundo moto” detrás de estas decisiones. A fin de cuentas, esta bici surge de la mente de un tipo como Aldo Drudi que es para muchos una leyenda del diseño industrial en el mundo de la moto.

En mi caso concreto, el sistema tiene un funcionamiento correcto a la hora de aislar la pedalada y sublime cuando hablamos de aislar los efectos de la frenada en el basculante. Si sumas suavidad, progresividad y falta de interferencias con la frenada imagina lo que consigues en los senderos de bajada: Diversión sobre raíles.

Todo tiene un sentido

El concepto de batería interna y fija parece que no es definitivo. Y no hace falta hablar de una “resistencia épica” por parte de unos pocos. A fin de cuentas, hay marcas como Trek que siguen confiando en el concepto de batería integrada pero extraíble. También, hace unas semanas, probamos la nueva BH iLynx+ en la que también podemos sacar la batería fácilmente. Y no nos podemos olvidar de la Lapierre Overvolt GLP, una bici diseñada para competir, y que surge de las especificaciones dadas por Nicolas Vouilloz, que coloca una batería externa en la parte central del cuadro.

En el caso de la MIG también se mantiene externa, aunque Ducati prefiere el concepto “semi integrada”. Luego veremos porqué.

Podría decirse que la marca italiana defiendo o apuesta por un concepto antiguo, pero no lo es tanto. A fin de cuentas, el objetivo de Drudi en esta bici no era esconder la batería sino colocarla en el mejor sitio posible para que colabore en poner el punto de gravedad lo más bajo posible. Y lo consigue desplazando también el tubo vertical hacia atrás hasta el punto de colocar la batería prácticamente en la “cabeza” del motor. Tal es así, que incluso deja el espacio justo para la colocación del bidón (de hecho, hace que el cuadro tenga una franja central rebajada para incluirlo).

Lo que quiero decir es que este concepto está muy lejos de aquellos años en los que una ebike era una bicicleta con una batería “colgando”. Aquí partimos de una idea y un objetivo. Puede gustarte o no. Pero es una decisión y tiene una justificación.

La parte negativa es que la batería de 630 Wh de Shimano queda muy expuesta, pero Ducati lo soluciona con un carenado a prueba de bombas. La parte siempre positiva de las baterías que no son internas es la facilidad para cargarlas cuando quieras y donde quieras.

Por debajo de la batería encontramos el Shimano EP8, una auténtica referencia que apenas necesita presentación. Sus 85 NM y su altísima capacidad de personalización son su principal seña de identidad. Y no, no lleva el EP801. Pero es que ahora mismo estamos en esa fase de transición en la que todavía hay y habrá en los catálogos muchas bicis que no montén la versión 2.0 del EP8.

Conclusión. Un concepto de largo recorrido.

La MIG es un concepto, una forma de entender una ebike que sale de una mente brillante. Hay elementos que te pueden parecer llamativos en 2023, pero tienen algo más que una justificación, tienen una razón. Es lo que pasa con los conceptos que funcionan: tienden a perdurar.

Además, la MIG encaja perfectamente en la visión de Ducati. Una bici que llama la atención, una bici con estilo propio, una bici que busca la diversión. Una bicicleta eléctrica 100% ducatista.