MTB en otoño ¡vístete por capas!

A primera hora las temperaturas son bajas, incluso suele haber humedad. Luego sale el sol y hasta pasamos calor. ¿Cómo debemos vestirnos para hacer MTB en otoño con el máximo confort? Por capas. Os lo explicamos.
Para hacer MTB en otoño lo mejor es… vestirse por capas
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autor mtbpro J. Daniel Hernández
autor de las fotos Archivo

fecha20/10/2023


Suena el despertador, desayunamos y preparamos la bici para salir… en ese momento nos surgen las dudas ¿vamos con una chaqueta de invierno, con un maillot de manga larga es suficiente o directamente salimos en manga corta? Y es que, en otoño, al igual que al comienzo de la primavera, los días comienzan muy fríos y húmedos y según avanzan las horas, la temperatura comienza a subir hasta alcanzar temperaturas más agradables para luego volver a bajar, casi de golpe, cuando el sol comienza a ponerse.

Además, a eso hay que sumar que en MTB alternamos tramos más abiertos con zonas boscosas y sombrías en las que la temperatura es más baja y la humedad es más alta. Por eso a veces es complicado decidir la ropa que debemos usar. Y para acertar lo mejor es seguir la teoría de la cebolla o vestirse por capas.

Capas de ropa para MTB en otoño

En otoño (y en primavera) es complicado acertar con la ropa con la que debemos salir a montar y en cualquier grupo que se junte vemos de todo. Desde el valiente que sale en manga corta arriba y abajo, con el gran riesgo de pasar mucho frío, al que sale vestido como en lo más crudo del invierno, también con riesgo de pasar un calor excesivo y sufrir las consecuencias de una sudoración excesiva.

Para ello lo mejor es vestirse por capas y con complementos de forma que, según avance el día y suban las temperaturas, nos podamos ir quitando algunas de ellas para adaptarnos al aumento de la temperatura. O, por el contrario, ponernos más prendas si salimos por la tarde y las temperaturas comienzan a bajar. Además, hay que tener en cuenta que en MTB es habitual que entremos en zonas de bosque, más sombrías, y en montaña, donde las temperaturas son más bajas y, además, cambiar rápidamente.

Para hacer MTB en otoño lo mejor es… vestirse por capas

Por eso, la primera prenda que recomendamos son las camisetas interiores o baselayer que ayudan a mantener la temperatura corporal al tiempo que evacúan el sudor. Este tipo de prendas las encontramos específicas para invierno, verano o entre tiempo.


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La siguiente prenda que podemos usar es un maillot o jersey de manga larga y, en caso de que no lo tengamos (o sepamos que la temperatura va a subir rápidamente) podemos apostar por el combo maillot + manguitos, que son un complemento ideal para no pasar frío en los brazos a primera hora o durante los descensos y que son muy fáciles de poner y quitar y se guardan con facilidad en cualquier bolsillo del maillot, de la riñonera o la mochila de hidratación.


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Para la parte de abajo sucede algo similar, aunque hay que tener en cuenta que en cuanto pongamos las piernas en movimiento cogeremos temperatura, por lo que no hace falta recurrir a culotes largos (los reservamos para los días más fríos). No obstante, tanto si usamos culote como baggy, un buen complemento son las perneras, que hacen la misma función y tienen las mismas características que los manguitos y que incluso podemos utilizar si tenemos por delante un descenso prolongado y queremos evitar que se nos queden las piernas muy frías.


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Siguiendo con la parte superior… otro elemento muy práctico y útil son las chaquetas ligeras o los chalecos, prendas muy finas, con un buen nivel de protección térmica y transpirabilidad pero que, al ser más finas, podemos quitarnos y llevar dobladas en los bolsillos del maillot. Estas prendas nos protegerán en las primeras horas del día, pero también en caso de que nos sorprenda una lluvia ligera o algunas rachas de viento. Igualmente, y como venimos diciendo, para esos tramos más sombríos y húmedos.

Para hacer MTB en otoño lo mejor es… vestirse por capas

Por último, hay otro accesorio muy práctico, el pañuelo tubular que tiene utilidad tanto en verano (por el polvo) como con frío, ya que sirve para protegernos la garganta y/o las orejas, dos zonas muy sensibles a las temperaturas más bajas. Incluso se pueden usar por debajo del casco a forma de bandana para protegernos la cabeza en caso de que nos sorprenda mucho frío.

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