Las 5 claves de la nueva Trek Procaliber Gen3
J. Daniel Hernández
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01/09/2024
Dentro de los circuitos de XCO y XCM hemos visto, en los últimos años, como la tendencia de los corredores y las marcas ha sido ir dejando de lado las bicicletas rígidas en favor de unas dobles cada vez más competitivas en peso, rigidez, etc. El diseño de unos circuitos de XCO cada vez más técnicos, con subidas cortas pero explosivas seguidas de bajadas repletas de artículos artificiales, saltos y cortados poco naturales ha llevado a que unos y otros tomen esta elección.
De hecho, hemos visto como las marcas han lanzado bicicletas dobles de corto recorrido detrás y con sistemas en los que la rigidez es el factor diferencial principalmente para circuitos menos técnicos. O incluso como hizo Trek, que se la puede considerar una de las pioneras en este sentido al apostar prácticamente todas sus cartas a la Supercaliber. Otras marcas, como Specialized, ofrecen alternativas diferentes, una doble más al uso (como la reciente Epic 8) y una de corto recorrido como la Epic WC; o BH, que presentó el año pasado su nueva Lynx Race y esta año han desvelado una doble de corto recorrido detrás.
En este punto muchos corredores reservaban las rígidas, como mucho, para las competiciones de Short Track (por ejemplo, David Campos logró su victoria en el Campeonato de Europa de XCC de 2023 con una Orbea Alma con horquilla rígida).
Pero Trek ha vuelto a dar una vuelta a este concepto con su nueva Procaliber Gen3 con el nuevo sistema IsoBow. De hecho, para la rueda delantera han optado por una horquilla de 120 mm de recorrido (evidentemente se podría poner una horquilla más corta, pero no hay que olvidar que ésto afecta a la geometría y ésta se ha diseñado para ese recorrido de horquilla).
Ahora vamos a ver las 5 claves de esta nueva Procaliber
1.- Todo a la flexión del carbono: El IsoBow prescinde de la rótula articulada del IsoSpeed o de cualquier elemento articulante o capaz de absorber las vibraciones (como elastómeros, muelles, etc.) dejando todo en manos de la flexión controlada del carbono ofreciendo cierto “recorrido” (a falta de probarla, sería mejor decir capacidad de absorción de vibraciones y pequeños impactos).
2.- Formas poco convencionales: Esta flexión controlada del carbono va acompañada de un nuevo diseño del cuadro, el IsoBow, en el que los tirantes se prolongan, en línea recta, hasta bien avanzado el tubo superior dejando un “hueco” en la zona de unión con la tija del sillín. Como dijo Trek en su presentación, todo el cuadro ha sido diseñado de forma holística para que todas las fibras trabajen como un conjunto para lograr el compromiso absorción-rigidez deseado.
3.- Floating Brake Mount: Para favorecer esta mayor flexión, incluso durante las frenadas, el freno trasero se ancla ahora mediante el sistema “Floating Brake Mount” que ya vimos en la Supercaliber Gen2 que permite aislar los tirantes de las fuerzas que se ejercen al frenar.
4.- Geometría más moderna: Además de los ligeros retoques de la geometría, y el aumento del paso de rueda, que se hacen cada nueva evolución de una bici, no hay que olvidar que la Procaliber Gen3 equipa una horquilla de 120 mm, lo que ha dado como resultado final algunos cambios como el ángulo de la dirección de 67º y un ángulo de sillín más vertical (74,3º), más en línea con lo que hemos visto en las últimas novedades de XCO.
5.- Un cuadro más ligero: Gracias al nuevo diseño del IsoBow, el nuevo cuadro es 150 g más ligero que el anterior. El nuevo cuadro declara un peso de 1.150 g (pintado).
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